III TRAIL MALLOS DE RIGLOS.

Shhhhhhh, que estamos en Riglos y la magnitud de estos mallos impone su silencio. Solo viento, piedra y el espacio abierto.

Le debo a la organización del Trail Mallos de Riglos, a Pau Jordán  en concreto, el verme aquí de nuevo, gracias a su invitación  por haber pasado por el podio el año anterior. Sólo aquello me valió para echar más kilómetros a las piernas, primero con la invitación a participar  en las Crestas del Infierno-Gavín-, organizada por Sergio Cazcarro Arasanz y ahora a repetir en Riglos. Igualito que las celebrities pero sin tacones.

Con mi amigo de runningo, Manuel

zona de senda hasta llegar a la parte superior de los mallos

Esta carrera para mi gusto, y creo que lo compartirá gran parte de los 150 corredores, bueno 130 que tomamos la salida de la carrera larga, es una de las más bonitas que la montaña oscense puede dar . La preside en todo momento el entorno mágico de los Mallos de Riglos que se alzan vertiginosos, primero ante nuestras miradas, y después, bajo nuestros pies, cuando descendemos desde lo más alto hasta el mismo pueblo.

tras un corredor francés, llegando al castillo de Sarsamarcuello

A quien le gusten las carreras de montaña y sea de por aquí, correr en torno a los Mallos es como quererlos más y a la gente que viene de cualquier otro punto de España, muchos de Lléida, Madrid e incluso de Francia, como en esta ocasión, el estar aquí marcará un antes y un después, no se puede evitar quedar sobrecogido ante su imponente presencia y su silencio, que solo humaniza la  encantadora gente que vive en el pueblo de Riglos, un pueblo de verdad, de los que nos llevan a nuestra niñez y a veranos de calor, corral de gallinas y fachadas encaladas. Me encanta estar aquí. De venir a la prueba, vale la pena alojarse en el Refugio de Riglos  y levantarse al día siguiente a pie de carrera y así poder disfrutar un poco más del entorno; el atardecer en Riglos es espectacular y más aún si la tarde es despejada y el sol ilumina la roja de los mallos que se tiñe de rojo. Este momento mágico lo conocen bien los escaladores, que apuran la tarde en sus paredes para tener el privilegio de estar ahí y tener ese regalo para sí solos.

Hoy en día los trail se están poniendo cada vez más bestias, eso sí, empiezan a  diversificar distancias,  lo cual hace más asequible el disfrute para todo tipo de corredores. Por ejemplo aquí se ofrece dos distancias, de 10km y 500 m de desnivel y de 30 km y 1800 m de desnivel, este año 2016 se ha estirado ya que el año anterior la larga era sobre 26 km. Lo pasmoso es que en la distancia de 10 km ,han participado nada más y nada menos que 70 chicas!. Eso es una maravilla y tiene que ver no solo con la distancia sino también con el hecho de que la organización dispone de un sistema integrador de todos los miembros de una familia, ya que pone animadores para los más pequeños, que son cuidados por monitores y que también pone en marcha una visita cultural, natural con monitores ambientales que ayudan a descubrir este entorno maravilloso a los acompañantes de los deportistas. Con ello está claro que se ayuda a muchas chicas a participar en estas pruebas, y en ese sentido son un ejemplo a seguir si queremos estar las mujeres en estos cotarros sin volvernos locas con la logística familiar.

La carrera

Este año 2016 la carrera de 10 km discurría por el camino que da la vuelta a los Mallos. Es un recorrido majísimo y espectacular ya que se sube por el camino exterior al macizo y se baja por la pendiente senda que se encuentra entre el Mallo Pisón y el Puro, el Fire con vistas al Río Aragón y a Murillo. http://trailmallosderiglos.blogspot.com.es/

La carrera de 30 km ha estado muy bien, haciéndonos descubrir bosques de robles y sendas perfumadas de romero increíbles.

zona de robledal donde da comienzo la fuerte pendiente que nos llevará desde la cara sur al control de la Peña del Sol

A esta distancia le tenía un poco de miedo, bueno, sobre todo a 4 km, los que había crecido desde el  año anterior. Pero gracias al sube y baja  de pendientes  de hasta 500 m, 300 y 200 m de desnivel, te permite que vayas recuperando y al final te tragas los kilómetros.

con la camiseta del club Mayencos se te ve enseguida, aunque la gente me decía que no tenía 60 años,jj

La carrera, como siempre, se dejó domar gracias a las cuatro palabras, pero cuatro de ánimo y amistad que se dan gratuitamente entre los corredores y los voluntarios que son nuestros cuidadores, de lo bien que nos tratan; fue una gozada encontrar amigos de kilómetros como Raul Concheso y gente de su club Trailrunning. http://rottenhd.blogspot.com.es/

Al final segunda ,- menos mal, pensé,- este año no me toca seguir entrenando para ir a otra,jeje. Me emocioné un poco por haber podido con la prueba ya que le tenía canguelo y podérselo ofrecer mi esfuerzo a mi familia que las está pasando perras con la salud y a mi club Mayencos de Jaca con el que he podido volver  a esta droga tan buena que es la montaña.

Diría que he ido  a 7,35  el km, igualito que el año anterior.

Aquí os dejo el blog donde están las clasificaciones http://trailmallosderiglos.blogspot.com.es/

fotos y el perfil. El recorrido y  otros recuerdos.

la familia en meta, un lujo

con mis compis de sudores, Maria Irigoyen campeona de este año y Nuria Domper del CP Barbastro

oéééééé´, otra cosa no, pero en el candelabro….

El de los chicos,solo absoluta

http://www.cpmayencos.org/as noticias

Un recuerdo también para la persona que tristemente  sufió un accidente al bajar de la Ferrata del Mirador de los Buitres, podíamos haber sido cualquiera de nosotros…

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